martes, 2 de octubre de 2007

DIFERENTES LEYES DEL ETERNO FEMENINO

Leyes de evolución de la histeria femenina
A los 10 años de edad, la histeria se produce por el incipiente desarrollo hormonal.
A los 20, por la búsqueda de su identidad como mujer.
A los 30, por conseguir un buen candidato para no quedar sola.
A los 40, porque el espejo es muy cruel. A los 50, por la menopausia.
A los 60, por la sobreprotección de hijos y los nietos. En caso de no tenerlos, por sobreproteger a alguien de su entorno.
A los 70 y posteriormente, porque, a esta altura de la vida... ¿para qué cambiar?
Ley máxima de la envidia femenina: Los concursos de belleza están todos arreglados
Ley de la ventaja femenina
Siempre será mas fácil fingir orgasmos que erecciones.
Ley de la incompatibilidad de placer
La probabilidad del goce sexual pleno es inversamente proporcional a la búsqueda del embarazo.
Ley de las ganas
Los hombres siempre quieren.
Las mujeres también.
Siempre que un hombre y una mujer quieren están en lugares distintos.

Ley de los programas televisivos para mujeres
Los programas que enseñan a hacer cosas a la mujer, son para mujeres que no tienen nada que hacer.
Ley de compensación laboral
Diez centímetros menos de largo de pollera siempre pesan más que diez llegadas tarde a la oficina.
Ley del recién conocido
Cuanto mas amistoso y comprensivo se muestre un hombre con una mujer que acaba de conocer, peores intenciones tiene.
Ley sexual de la billetera
Cuanta más plata gasta un hombre en una mujer, más provecho buscará sacarle a su inversión. ¡La mujer tiene la virtud de hacer correr al hombre detrás del capital invertido !

Enviado por Victoria Sandoval. ¡Muchas gracias!

Se puede perdonar, no olvidar: Autor: Gabriela Gayani

Aun cuando la infidelidad se vuelve cada vez más frecuente, las diferencias de género son importantes a la hora del perdón, especialmente por la presión sociocultural. La posibilidad de perdonar existe, no sin antes pasar por un largo período de duelo y reparación, que no contempla el olvido.
Gabriela Gayani
Ya en los tiempos clásicos, Venus – la diosa del amor y la belleza- fue obligada por su padre a casarse con Vulcano. Ella nunca lo aceptó y le fue infiel con Marte y Mercurio. Tal vez ésta sea la primera infidelidad conocida en el mundo.No pasó tanto tiempo y el episodio se repitió: Helena huye con Paris a Troya y deja desconsolado a su esposo, Menelao. Esto da inicio a la guerra entre griegos y troyanos, una de las más cruentas de la historia.Tampoco es fácil olvidar a Enrique VIII, que no sólo mandó matar a sus ex esposas, sino que cambió la religión de su reino y se autonombró cabeza de la Iglesia para así poder contraer nuevos matrimonios sin cargos de conciencia.Sin embargo, es el caso de Helena y Menelao, el que más nos acerca a un tema de constante discusión en nuestros días, ¿tiene perdón la infidelidad?. Porque a pesar de la pérdida de miles de vidas y los años de lucha, al vencer los griegos, Menelao perdonó la infidelidad de su mujer y la llevó de vuelta a casa, no sin antes reparar las mutuas culpas.Las sicólogas Clemencia Sarquis y Paula Serrano abordaron las implicancias de la infidelidad y la posibilidad del perdón en un desayuno organizado por Comunidad Mujer.Ambas apuntaron al hecho de que la fidelidad, es decir, la lealtad y observación de normas acordadas es un acto de voluntad, una opción que toman dos personas. “Es la capacidad de comprometerse con el otro”, según Paula Serrano.Cuando uno de los miembros de la pareja rompe el acuerdo mutuo y cambia las reglas del juego, se produce la hecatombe y arrecia la angustia.Para Clemencia Sarquis, no hay peor herida que la provocada por la infidelidad; quien la sufre, queda devastado emocionalmente, “peor que si le hubiera pasado un huracán por encima”. Dice no conocer a nadie que no recuerde, como si estuviera grabado en la retina, el día, la hora, las circunstancias y hasta lo que vestía el momento en que se enteró de la infidelidad de su pareja. Esa imagen emocional queda para siempre.Ante la pregunta ¿tiene perdón la infidelidad?, comenta que hay tantos tipos de perdón como clases de adulterio. No es lo mismo perdonar una aventura a enterarse que la pareja lo abandonó todo y está con otro u otra en Miami y no volverá nunca más.Según ella, las infidelidades van en un continuo desde la necesidad sexual pura, al amor romántico o la absoluta dependencia emocional del amante. Los matices hacen que la resolución del problema sea absolutamente distinta.Clemencia Sarquis remarca que la fidelidad es una opción; “a nadie le pasan cosas, las personas optan, hay señales que se vislumbran y cada uno debe darse cuenta si toma la bifurcación o sigue el camino recto. Estamos hablando de gente responsable, sana, con juicio de realidad mantenido”. La sicóloga asegura que el salvavidas del amor, en todo sentido, es el perdón, pero éste no puede darse si la persona no reconoce su falta. Es el polo opuesto al morbo; es la construcción, la reparación de la herida. Para que exista (perdón) es necesario que el que cayó en falta lo pida y el que fue engañado, lo otorgue. “El concepto de perdón de los humanos es errado, porque quieren perdonar y olvidar. Eso no se puede, pues el pasado persiste, las huellas están y existe un sufrimiento profundo. Si somos capaces de aprender de él, entonces, sí podremos perdonar”, precisa.A su juicio, el perdón solo no basta; se necesita inevitablemente la reparación. Siempre que se sufre un duelo –en este caso, la infidelidad-, hay que vivir el proceso de repararlo, de otra manera, no se puede perdonar.Y reparar es, según el diccionario, enmendar, reponer, arreglar. ¿Cómo se arregla esto?, se pregunta y explica que dependerá de la situación de la pareja. Si su vida anterior ha sido estable y satisfactoria, es probable que el proceso sea más corto, pero –en general- se necesita mucho tiempo y voluntad para retomar la pareja, vivir la reparación y, finalmente, el perdón.Los factores en juegoQuizás la mayor dificultad para perdonar una infidelidad se encuentre en los efectos que ese acto de deslealtad tiene en la autoestima del afectado y las evidentes connotaciones sociales que hoy tiene el hecho.Paula Serrano explica que a principios del siglo pasado, las mujeres suponían que los hombres les eran infieles y, si los pillaban, había dolor y miedo, pero se sobrellevaba porque la sociedad era machista y las mujeres compartían esa carga común. Hoy las cosas han cambiado y de esa silenciosa solidaridad entre las mujeres se ha pasado a la exposición y el estigma social. Y esto, además, viene acompañado de un profundo cuestionamiento personal. “Me fueron infiel, por lo tanto, estoy gorda, estoy fea, estaré poco al día, seré poco interesante, seré mala para la cama”, son algunos de los que mencionó Paula Serrano.Así, la infidelidad gatilla inseguridad y la pérdida súbita de una serie de condiciones que se suponían adscritas a la identidad de una persona. Esto toca a hombres y mujeres por igual, pero Paula Serrano asegura que ellos se ven más golpeados. “A medida que la infidelidad femenina avanza, el temor de los hombres es mayor. La pérdida para ellos es mucho más brutal en términos de ego, porque nuestras heridas narcisistas son que nos quitan el traste, las pechugas, el pelo lindo, un montón de cosas; a ellos les quitan el pene”, explica.Agrega que el dolor que sufre el varón no tiene punto de comparación con el de la mujer. Afirma que socialmente aún es más aceptado que el hombre sea infiel. “Las mujeres son compadecidas, apoyadas; ellos, en cambio, son ridiculizados”.La profesional cree que por estas circunstancias -donde además hay una suerte de presión de los demás hombres que también se sintieron amenazados- el varón tiene menores posibilidades de perdonar. Es obligado a tomar una posición de reinvindicación del género.A juicio de Paula Serrano, el perdón no tiene mucho que ver con el amor, sino que con la capacidad de sanar la identidad personal dañada. “En este mundo todos saben que se pueden volver a enamorar, pero no cómo sanar las heridas, cómo recuperar la tranquilidad y dejar de soñar la pesadilla del engaño”, insiste.Añade que el mundo social aumenta las heridas y disminuye la posibilidad de perdonar, en los hombres especialmente.

LA INFIDELIDAD DESDE UN PUNTO DE VISTA MORAL


La infidelidad es una de las razones principales por las que una pareja rompe su relación. Los "cuernos" destruyen la confianza de los enamorados y los pilares sobre los que se cimienta una relación. En la mayoría de los casos las personas son infieles cuando la relación no alcanza sus expectativas, están buscando algo en la pareja que ésta no es capaz de ofrecerles. La solución, en vez de basarse en el diálogo, es una salida aparentemente más fácil o cómoda: la infidelidad.
Los hombres también traicionan, para demostrar su masculinidad porque la sociedad espera que él actúe así. La pregunta que muchas personas se hacen es cómo descubrir y asegurarse de que la pareja les está siendo infiel. Si vives con tu novio, observa su comportamiento, si no vuelve a casa a la hora de costumbre, si ya no existe diálogo entre vosotros, si se irrita contigo por cualquier motivo. Estas actitudes NO son síntomas de una traición, pero sí indican que algo no funciona en vuestra relación y que por lo tanto existe peligro de infidelidad.Para los hombres es más difícil saber si les están siendo infieles, puesto que ellos son menos observadores y se fijan menos en cambios sutiles que sin embargo las mujeres descubren a la primera. Los hombres en general temen o sospechan que su pareja les está siendo infiel, cuando ésta se niega a mantener relaciones sexuales como de costumbre. Existen mujeres que jamás perdonarían una infidelidad y otras que sin embargo deciden auto engañarse para no tener que enfrentarse a la realidad. Descubrir que hemos sido traicionados por la persona amada siempre es una experiencia dolorosa y hasta humillante, puesto que se ponen en juego los valores que fundamentan una relación de pareja, como son la confianza, la sinceridad y el respeto.
Perdonar o no una traición depende de la persona y del tipo de relación que existe, ya sea por motivos religiosos o porque no quieren hacer sufrir a sus hijos. En el caso de las mujeres que deciden perdonar (pero no olvidar), la infidelidad suele ser un arma arrojadiza muy frecuente en las discusiones, que puede desgastar más todavía la relación. No recuerdes constantemente la infidelidad de tu pareja, si no eres capaz de superar y olvidar, quizá sea necesario plantearse una solución tajante. Muchas mujeres que han sido infieles se torturan porque no saben si contárselo a su pareja, se sienten mal, pero lo primero y más importante es descubrir el porqué de la traición. Si has sentido esa necesidad es porque tu pareja no te da algo que tú necesitas y no tiene por qué estar relacionado con el sexo.
Debes evaluar los pros y los contras antes de decidirte a contárselo a tu pareja, puede que sólo fuera para ti una aventura que te haya hecho ver que no quieres abandonar a tu novio; en este caso puedes volver a reconstruir tu relación. Si decides ser sincera es posible que tu pareja no pueda perdonarte y eso dependerá de lo importante que seas para él. Muchas veces ellos deciden perdonar, pero la infidelidad estará presente durante mucho tiempo en su memoria y será difícil que vuelva a confiar en ti, por ello es aconsejable buscar ayuda profesional y no depender de los consejos bien intencionados de las amistades.
La infidelidad y sus motivos
Las 9 razones más comunes por las que ‘ponemos los cuernos’ son resultado de la búsqueda de la satisfacción de necesidades que no encontramos en nuestra pareja
Una de las peores traiciones hacia nuestra pareja o por parte de ella es la infidelidad. Generalmente pensamos que la persona infiel es la única culpable, sin embargo la infidelidad es el resultado de la crisis de una pareja, pues quien es infiel lo hace porque busca en otra persona cuestiones sexuales, emocionales o intelectuales que su pareja no le da.
La infidelidad no sucede espontáneamente, siempre hay motivos que la provocan. La lista de razones es interminable, pero los sexólogos especialistas en terapia de pareja coinciden en que en todas se intenta satisfacer las carencias del matrimonio:
Las 9 razones más comunes
1. Nos sentimos devaluados. Terminado el enamoramiento, enfrentamos a la pareja real y olvidamos a la idealizada, y sus conductas no siempre placenteras en la convivencia defraudan nuestras expectativas. Si la pareja nos abandona al centrarse sólo en sus objetivos personales y no en los de ambos, y al mismo tiempo nos relacionamos con una persona distinta que nos hace sentir más valorados, la elegimos inconscientemente como nueva compañera. Principalmente para las mujeres, es muy importante sentirnos bellas y deseadas por nuestro hombre. Si no se cumple nuestro objetivo, sentimos una gran frustración y se devalúa nuestra autoestima. Una forma de sentirnos de nuevo atractivas y deseadas, es siendo cortejadas en una relación extramarital.
2. La monotonía. Cuando nuestra pareja descuida el tiempo en común por sus actividades personales y deja de tener detalles cariñosos con nosotros, sentimos que el amor se acabó, se produce un distanciamiento y nos empezamos a sentir encadenados a pasar el resto de nuestros días en una relación que ha perdido su encanto. Un matrimonio sumido en la rutina y en el aburrimiento se puede venir abajo a causa de un encuentro con un intruso que lllegue y nos aborde con el misterio, encanto y riesgo de los que carece nuestra relación.
3. Una vida sexual deficiente. El sexo es un elemento esencial en la pareja y si éste es defectuoso, quien se siente insatisfecho tiende a buscar fuera de la relación la satisfacción sexual que no encuentra en su pareja. Si a pesar de sentir un gran amor por la pareja, en la cama no encontramos nada excitante, nos vengamos teniendo relaciones sexuales con otra persona, porque estamos enojados con nuestra pareja que no quiere hacer el amor o no quiere llevar a cabo nuestras fantasías sexuales.
4. Dependencia emocional de los padres. Si nuestra pareja no es emocionalmente independiente de sus padres y no establece límites respecto a ellos, esta conducta infantil nos hace sentir sin su apoyo, y nuestra necesidad insatisfecha de ser escuchados y atendidos nos impulsa a buscar una relación extramarital.
5. Buscamos nuevas sensaciones. Si se acaba la seducción del enamoramiento y se vive en el hastío de una relación, hay quienes necesitan seguir satisfaciendo su necesidad de seguir enamorados. La curiosidad de experimentar el sexo con otras personas y de vivir la aventura es un fuerte motor para buscar un affair.
6. Idealizamos a la pareja. Para continuar idealizando a nuestra pareja, muchas veces elegimos como amante a una persona totalmente opuesta. Hay quienes llevan a cabo todas sus fantasías sexuales con el amante y no con la pareja para sentir que la siguen manteniendo en el concepto de ‘decente’.
7. La pareja lo permite. Se dan casos en que la pareja está de acuerdo en que tengamos relaciones extramaritales, porque es consciente de que necesitamos satisfacer las deficiencias que existen en nuestra propia relación.
8. Sentimos amenazada nuestra libertad. Cuando la pareja es asfixiante o nos da pavor perder nuestra independencia y quedar atrapados en una relación, intentamos sentirnos libres cometiendo actos de infidelidad.
9. Alarde de poder. Por haber obtenido poder, dinero y una posición social, hay quienes sienten que se han ganado el derecho a tener un mayor potencial sexual con el sexo opuesto.
La infidelidad es un síntoma de la serie de crisis por las que atravesamos como pareja. Si buscamos en el fondo, descubriremos que somos infieles cuando no encontramos en nuestra pareja lo que buscamos y nuestra relación no satisface completamente nuestras necesidades. Sin embargo, superar la crisis dependerá de la forma en que podamos comunicarnos como pareja.

Los 10 Mandamientos del Hombre Infiel

Los 10 Mandamientos del Hombre infiel*He aquí niños y niñas, lolas y lolos, jóvenes y ancianos una práctica guía de aprendizaje para saber cómo, cuando y, en definitiva, si tu pareja te es infiel o quiere serlo. Lee atentamente y te darás cuenta de la verdad de estas líneas.Mandamiento Nº 1: El Baño.Es muy curioso escuchar a un hombre hablar por teléfono. Es más extraño aún escucharlo reír cuanto entabla una conversación por un celular. Pero lo que resulta inaudito es sentirlo hablar por teléfono móvil en el baño y , para esto, armar todo un show de teatro impresionante._ TOC-TOC-TOC... Amor mío... ¿que haces ahí?- pregunta Ella inquieta desde las afueras, al escuchar un susurro acusador desde adentro-._ Shhhhhhhh...- reclama el macho recio- no puedo ahora ni leer el diario en el baño tranquilo._ Es que.... está servido el almuerzo... se te va a enfriar._ Yaaaaaa.... voy altiro- responde cínicamente desde el baño, con el diario en las manos, su trasero posado en la tasa y el celular oculto por si su esposa tuviese la osadía de entrar. Espera unos segundos, tres o cuatro quizás y tira la cadena o da la llave del agua para que no se escuche lo que dice..._Sí.....sí -repite tierna y silenciosamente- es que ella estaba afuera y no podía hablarte... Qué?... sí...sí...yo también te quiero mucho –y como que baja el tono en esa parte, acusando inevitablemente el pecado-.Cuando sale se sienta en la mesa y no dice ninguna palabra.Mandamiento Nº 2: Excusas, excusa y más excusas.Si hay alguien que busca excelentes motivos por los cuales pasan o existen tales o cuales evidencias... es el Hombre.Dentro de las más notables se encuentran:_Para explicar lápiz labial en la camisa: -El: lo que pasa es que me corte cuando me afeitaba.-Ella: pero mi amor... si tienes máquina eléctrica.-El: la cambie... porque me irritaba._Para explicar un beso en el rostro:-El: Estemmmm.... mi jefa me dio un ascenso e hizo que todos en la oficina me saludaran con un beso._Para explicar rasguñones en la espalda: -El: Ammmmmm..... el otro día cuando iba por la calle en bicicleta pasé debajo de un árbol con ramas filosas y me raspé la espalda... Auchhh me dolió mucho... ¿me haces cariñito?Entre otras.Mandamiento Nº 3: Número equivocado.Al menos 6 de las 10 veces que Él contesta el teléfono es alguien que... según Él:1-Llamó equivocadamente2-Cortó3-Llamada por cobro revertido o por pagar4-Publicidad5-Gánese un Millón de Dólares!!!Obviamente una farsa.Mandamiento Nº 4: Celular sin Batería.-Ella: Préstame tu celular para llamar?-Él: Pero si tu tienes el tuyo.-Ella: Está sin plata.-Él: Llama por teléfono en la tienda.-Ella: Es que no quiero salir a la calle.-Él: El mío está sin batería. (esto lo dice tratando de sustituir obviamente la frase: “lo que pasa es que si te lo doy vas a ver todas las llamadas que he hecho para hablar con la otra”) Mandamiento Nº 5: Estas celosa?Si se fijan, mujeres mías, ustedes siempre para Él van a estar mal. Si le dicen que ven algo que las pone celosas, lo más probable es que les digan que son sólo ocurrencias tontas las que las hacen ver cosas... y nada más.Frases comunes que usan al ser acusados son:*Nooooooooooooooo.... cómo se te ocurre?... si ella está casada.*jajajajajaja (risa fingida y de nervios)*Ni tonto... no ves que aquí tengo a la mujer de mis sueños. (y te abrazan friamente)*Como se te ocurre esa tontera?!!!*Santo Dios... Ayuda a esta mujer!!!Mandamiento Nº 6: Salidas nocturnas.Comúnmente los hombres infieles “coincidentemente” tienen trabajos en los cuales los jefes los “hacen salir hasta tarde a trabajar” fuera de horario.Mandamiento Nº 7: Canción tras canción.En palabras simples y comunes yo TE AMOOOOOOOOO..... (aúlla ÉL apasionadamente en la ducha. Se lava el pelo y su cuerpo ocupando prácticamente EL TRIPLE del tiempo habitual.)Mandamiento Nº 8: Ropita nueva.Para los más suertudos (lo digo por el dinero) ir al Mall o a un centro comercial a renovar su tenida de forma frecuente es una gran seña.Para los más pobrecitos... con una lustrada de zapatos basta.Mandamiento Nº 9: En la cama.Me limitaré a decir que... para ellos... la NOCHE ES PARA DORMIR.Mandamiento Nº 10 y último.Lo más importante... si te le quedas mirando fijamente ten por seguro que no te dirán como cuando te conocieron: TE AMO.Al contrario, te mirarán con cara de desprecio y culpabilidad y escucharás con notable tono de cinismo:Que miras?!!!!Eso es todo. Adiós.